NOTICIAS

Estudian la posibilidad de combatir las temidas heladas

Los agricultores han empezado a poner en marcha una técnica curiosísima para evitar que la flor de los frutales sufran las consecuencias de las bajas temperaturas que se suelen dar algunas noches de los meses de enero y febrero principalmente. Se trata de instalar aspersores de agua que se ponen en marcha cuando hay previsión de un fuerte descenso de temperatura. El agricultor es avisado a su móvil por un sistema automático de medición de temperatura, una vez el agua cubre el árbol con una finísima capa, curiosamente el «enemigo» a vencer, el frio, hace su trabajo: el hielo que se forma sobre la flor actúa de caparazón y evita que la temperatura baje de esos 0º. Luego solo queda esperar a que funcione.

es_ESSpanish